miércoles, 13 de abril de 2011

Unas cuantas monedas y los pies cansados.

10 a.m. de un lunes y sol golpea fuertemente arriba, donde duele; se lo digo yo, que ya llevo varios días en las mismas ¿no me cree? Pereza de tener que respirar eternamente, como si yo hubiera hecho algo malo, demás que si, pero ¿quién no lo habrá hecho?

Si que esta amargo esto, y todos estos edificios con los gritos represados y las calles estas que miran con ira acumulada. Hoy no duermo ¡Palabra! yo me conozco y se distinguir cuando me van a poder los parpados y cuando no, pero bueno, eso será mas tarde. Me aburre tanta maricada, ¿será que nada se podrá hacer? bueno, ¿pa' qué hacer algo? igual odio a ese señor que me esta mirando con esa cara de pocos amigos. Tranquilo, hermano, que ya me voy.

Definitivamente no existe escepticismo sin un optimismo muerto, así como anoche, que no quería hablarle a nadie. Será irme de esta ciudad y empezar a vivir por mi cuenta, sin pensar en nadie. Pensar es lo que lo mata a uno, si no fuera así no habría problemas.

¡Jueputa! ya se oscureció, más bien me voy a divagar un rato... o solamente a vagar, es mas entretenido, no hay que pensar tanto. Yo se lo digo porque lo conozco, así sea hace 2 horas, ábrase de aquí y a no pensar y a dejar vivir, porque es que pensar es lo que lo mata a uno. ¿qué? ¿que ya lo dije? bueno, no me importa, igual es verdad. Más bien me voy yendo que no tengo pa'l bus y me toca caminar bastante, y hasta mejor, porque ¡pa' qué me atraquen!.... pa' eso tengo tiempo y ademas no tengo plata. ¿Será que consigo así sea un cigarrillo? bueno ahí voy viendo. ¿Sabe que? no piense tanto que se enreda más, y pa' enredos, pa eso si no hay tiempo, es mejor dejar así, porque igual nada puede hacer, es que definitivamente no existe escepticismo sin un optimismo muerto, y no me importa que ya lo haya dicho. Más bien después hablamos.

Y acuérdese que sí se lo digo, es porque yo se.

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